El arte de la paciencia para rematar

Sin la necesidad de dominar en la persecución de la fuga, ni de un tren completo en el último kilómetro, Arnaud Demare (GFJ) es el primero de los veloces en repetir en el Giro. Con mucha paciencia, el campeón francés aprovechó sus sensaciones y potencia en el cierre para rematar con contundencia. El Groupama FDJ nunca se dejó ver sino hasta poco antes de llegar hasta los ultimos 4 kilómetros para dejarlo colocado en el repecho a 2,750 metros de la meta. Demare pasó esta dificultad al límite, pero el embalador sabía que aun cuando el cuerpo resiente estos esfuerzos finales cuando está en su mejor forma se puede recuperar para el remate final, tal y como sucedió.

Arnaud Damare (GFJ) ya sumó su tercera etapa de por vida en el Giro. Foto ©LaPresse/RCS

Después de pasar ese trance complicado, varios corredores de la clasificación general permanecían en un selecto grupo y en un momento Vincenzo Nibali (TFS) intentó probarse dentro del último kilómetro, quizás también para ponerse a salvo de tres curvas en ese último tramo. Jakob Fuglsang (AST) se puso como lanzador de Fabio Felline, siempre en el centro del lote. A estas alturas Peter Sagan había perdido posiciones, mientras que Demare pacientemente esperaba su turno de atacar junto a su compañero Simon Guglielmi. Una vez colocado a unos 500 metros, el embalador francés siguió algunas ruedas para subir posición y en el remate decidió a atacar a 200 metros. A su salida hubo reacción de Sebastián Molano (UAE) y Michael Matthews (SUN), pero la potencia del ataque de Arnaud dejó una bicicleta de por medio con el resto de la competencia. Sin embargo, aplaudimos esta oportunidad que le dio el UAE a Sebas, quien llegó 4° en la línea. El Ineos Grenadiers por su parte había trabajado los últimos 5 kilómetros para Jhonatan Narváez y el ecuatoriano consiguió un top 10.

Arnaud Demare, quien suma 12 victorias en la temporada, es un corredor que también ha buscado brillo en las clásicas. En su palmarés está una victoria en la Milano-Sanremo y de las 6 participaciones en París-Roubaix su mejor actuación ha sido un 6° lugar. Este año existía la posibilidad de que el corredor y su equipo consideraran dejar el Giro para que pudiera correr el infierno del norte si dejaba la carrera en la última semana, pero el mismo Demare confirmó a la dirección del equipo una vez desembarcados en Sicilia que quería terminar la cosa rosa e intentar ir por la disputa de victorias y la maglia ciclamino. Tras 6 etapas parece que es la decisión correcta y aventaja por 39 puntos a Peter Sagan ahora.

Durante la jornada el Bora Hansgrohe fue el equipo que relevó al Deceunick Quick Step en el control de lote cuando la fuga del día llegó a 9 minutos. El trabajo lo ha hecho el equipo de licencia alemana, con la excepcional labor de Cesare Benedetti y Matteo Fabbro, sin embargo, hoy Sagan quedó muy lejos de disputar siquiera el embalaje y además perdió el liderato de los puntos. En parte la labor del equipo también contempla proteger los intereses de Rafal Majka, per no han podido llevarse una alegría hasta ahora y seguramente esto crea impaciencia que no es sana.

El incidente mayor en la jornada fue el golpe que sufrió João Almeida cuando el equipo se orilló para que el portugués pudiera cambiar de radio. Aunque la carretera era ancha, algunos corredores no vieron al DQT parar y Brandon McNulty (UAE) se impactó contra la maglia rosa. Afortunadamente no hubo nada que lamentar, pero no dejó de ser un susto para ambos corredores. En la conferencia de prensa se le preguntó a Almeida si se estaba acostumbrando al protocolo de todos los días cómo lider y contesto con una sonrisa diciendo “me siento muy cómodo de rosa, aunque no debería acostumbrarme”. Hay una alta posibilidad de que los vientos hagan ella en el cierre de la etapa 7 pero João comentó que “afortunadamente estoy en uno de los mejores equipos para enfrentar los abanicos, y a mi me gustan porque hacen mas entretenida a carrera”.

TOP 20 CLASIFICACIÓN GENERAL ETAPA 6

La etapa 7 es de solo 143 kilómetros, lo que le permitirá al pelotón dormir un poco más ya que se sale de la misma ciudad de Matera rumbo a la costa del Adriático en Brindisi. Es la jornada más llana que tiene la carrera en esta primera semana, pero con la amenza de viento cruzado en los últimos 30 kilómetros.

PERFIL ETAPA 7

Aunque la jornada empieza en carreteras anchas y cómodas, el paso por diversos poblados y rotondas en el camino la harán también peligrosa. Nunca se le negará la posibilidad a una fuga, pero también los sprints intermedios son un botín que los embaladores querrán dominar para seguir cosechando puntos antes de llegar a la meta. El primero está a 76.8 kilómetros de meta en Taranto y el segundo en Grottaglie a 51.5.

La carretera en el cierre no tendrá tantos obstáculos ni desnivel. Es más dentro de los últimos 55 kilómetros hay un pequeño desnivel a favor que luego se convierte en un falso llano en el último kilómetro. El pelotón tendrá que subir por una rotonda a la derecha bajo un desnivel a 4 kilómetros y luego continuará en una larga recta hasta la primera curva 2,100 metros. Antes de llegar a la bandera de los últimos mil hasta tres curvas forzadas izquierda-derecha-izquierda para finalmente llegará a la viale Moro que se convierte en Togliatti en los últimos 500 metros siempre en línea recta.

Candidatos: Fernando Gaviria, Arnaud Demare, Álvaro Hodeg.