Salto de calidad
A 60 Kilómetros por hora. A ese ritmo fue que Bob Jungels entró al ultimo kilómetro llevando a su rueda al veterano lanzador Michael Morkov –quien hasta el año pasado era el hombre de confianza de Alexander Kristoff en el Katusha—y al recién estrenado en Handzame Classic, el colombiano Álvaro Hodeg. Sabían que las piernas ganadoras para el sprint inaugural de la Vuelta a Cataluña eran las del corredor nacido en Montería, y como el sobrenombre de la ciudad, Álvaro es la perla del Sinú.
A los 21 años, y en su primera temporada con el Quick Step Floors, Hodeg había estrenado palmarés en una clásica belga hace 4 días luego de 22 días de acción en la presente campaña. Esto levantó un poco el peso de las expectativas que el equipo le había puesto en los hombros al joven prospecto desde que lo llevó a hacer pruebas en los ultimos meses de 2017.
Álvaro Hodeg (QSF), momentos después de haberse estrenado en el World Tour. Foto BiciGoga
Álvaro tiene la constitución física de un clasicómano nato, aunque con esas explosivas fibras musculares que posee es momento de utilizarlas al sprint. Con su 1.86 de estatura y 75 kilos de peso no es fácil pasar puertos de montaña cuando se va a la velocidad con la que se corre en World Tour. Pero el Quick Step Floors supo esperar a Álvaro quien tras la subida final había quedado a cola del pelotón. Su equipo lo ayudó a recuperar posiciones en la bajada rumbo a Calella, una bajada qye iba controlando en punta el Movistar Team.
Johnatan Narváez, James Knox y Enric Max también colaboraron a que Hodeg pudiera quedar enfilado al tren que estaba preparado con Max Schachmann, Jungels y Morkov. Fue el corredor danés quien aguantó hasta los ultimos 125 metros para dejar al colombiano en una posición envidiable. Con relativa facilidad Álvaro pudo levantar las manos y el reflector del escenario se le vino encima en un instante al joven ciclista.
Los gritos de Álvaro se escucharon casi medio kilómetro más delante de terminada la meta. Allá en esa soledad del grupo de trabajo Morkov y Schachmann fueron los primeros en abrazar al colombiano. Poco mas tarde llegaron Jungels y Enric Mas y al final llegaron Knox y Narváez. Efusivos abrazos y felicitaciones se daban mientras el seigneur daba saltos de alegría y luego organizó a toda la escuadra para sacarles una foto. Aficionados con la bandera de Colombia llegaron a felicitar a Álvaro que para entonces ya era urgido por la organización para ir a cumplir con el protocolo.
Seguramente el momento lo recordará como un sueño. Irreal para un muchacho que sabe que ganó gracias a su calidad y trabajo del equipo, pero que quiere ver un video, una foto, para confirmar que efectivamente todo quedó registrado para la posteridad y que es cierto.
El Quick Step Floors sabe que quiere ver a Bob Jungels combativo en la clasificación general, pero el luxemburgués no dudo en meter las manos para conducir el tren poniendo la pauta a la que los rivales solo podían seguir la estela.
Abrazo entre compañeros de equipo. Narváez y Hodeg. Foto BiciGoga
A la pregunta de si él era mas rápido o Fernando Gaviria, Álvaro comentó que él sigue aprendiendo y que considera que su compatriota es el corredor más veloz del ciclismo a quien seguirá prestando ayuda en el plan que los directores de equipo dispongan en su calendario. Pero al igual que Gaviria, Hodeg también tiene sus ojos puestos en la Paris-Roubaix, un monumento que por sus características puede ser parte de su repertorio como especialista en carreras de un día.
La fortaleza y la juventud le da al corredor colombiano la llave del mundo. Ahora es cuestión de tomar responsabilidad con sus victorias y buscar continuidad con base en un trabajo al que religiosamente se ha dedicado en los ultimos años.
Álvaro venció al sprinter irlandés Sam Bennet quien venía apoyado por Jay McCarthy, ambos corredores del Bora Hansgrohe, y terminaron segundo y tercero respectivamente.
En contraste, Nacer Bouhanni -corredor con más experiencia—ha vuelto a desilusionar a la escuadra que ha intentando ponerle las mejores condiciones para volver a la victoria en World Tour que le ha sido esquiva desde la misma Vuelta a Cataluña del 2017. En esta jornada terminó 7º.
De los favoritos para la clasificación general el mejor ubicado fue Alejandro Valverde, 8º, gracias a un trabajo de dominio del Movistar Team en la bajada del único puerto previo a los ultimos 10 kilómetros. 158 corredores entraron en el lote mayor con todos los corredores latinoamericanos con excepción de Hernán Aguirre (MNZ) quien llegó en un corte a 26”.
Wilmar Paredes le da a Manzana Postobón la primera camiseta de la montaña luego de quedarse con el premio de la jornada. El antioqueño también produjo dividendos al esfuerzo de la escuadra rosa y eso le da voto al equipo para soñar con otra invitación a la Vuelta a España, cuya nómina no se ha dado a conocer.
La etapa 2 de la Volta será de 175. 6 km entre Mataró y Valls. Hay un premio de montaña de 3ª categoría en los primeros 15 kilómetros y uno de 2ª –el Coll Lilla—que corona a 10.6km de meta y tiene una vertiginosa bajada a la ciudad de Valls. A menos que una fuga mantenga un asalto, el escenario podría favorecer al campeón Alejandro Valverde, por cómo se vio el control del Movistar hoy.
Clasificación general latinoamericanos: 1º Álvaro Hodeg (Col-QSF), 17º Jarlinson Pantano (Col-TFS) a 10”, 37º Nairo Quintana (Col-MOV) 10”, 39º Egan Bernal (Col-SKY) 10”, 44º Esteba Chaves (Col-MTS) 10”, 47º Sergio Luis Henao (Col-SKY) 10”, 72º Jhonatan Narváez (Ecu-QSF) 10”, 88º Winner Anacona (Col-MOBV) 10”, 93º Daniel Martínez (Col-EFD) 10”, 104º Fabio Duarte (Col-MNX) 10”, 110º Jhonatan Restrepo (Col-TKA) 10”, 114º Aldemar Reyes (Col-MNX) 10º, 115º Sebastián henao (Col-SKY) 10”, 124º Fabrico Ferraro (Uru-CJR) 10”, 129º Jhojan García (Col-MNZ) 10”, 132º Wilmar Paredes (Col-MNZ) 10”, 1g5g5º Darwin Atapuma (Col-UAE) 10”, 161º Hernán Aguirre (Col-MNZ) a 36”.