Giro de ensueño para Qhubeka Assos y Campenaerts

La incertidumbre por la pandemia a finales de 2020 puso en jaque a muchos equipos que buscaban desesperadamente cómo sobrevivir el impacto económico. El NTT Pro Cycling había recomendado a sus corredores que buscaran contratos con otras escuadras y uno de los que pudo firmar antes de terminar el año fue Ben O’Connor con el AG2R Citroën. Pero Victor Campenaerts, actual récord de la hora, no tenía contrato y todavía en el mes de noviembre tocaba puertas para saber si podía continuar su carrera deportiva.

A los 29 años, el belga --dos veces campeón europeo de CRI-- estaba dispuesta a bajar su salario con tal de que algún equipo abriera sus puertas para no quedarse varado sin contrato. La organización del ahora Qhubeka Assos pudo asegurar la permanencia de la escuadra de licencia sudafricana a finales de noviembre de 2020, dándole la oportunidad a varios corredores del equipo de extender sus contratos y finalmente Campenaerts pudo respirar tranquilo.

En este Giro de Italia el equipo del manager Doug Ryder había ganado dos etapas en tres días, pero nunca esperaron llegar a tres victorias en 5 jornadas. El equipo había visto a Victor participar en dos fugas anteriormente para terminar 20 y 7 en el cierre. Pero la escapada de la etapa 15 fue diferente ya que pudo estar acompañado por dos coequiperos, Lukasz Wisniowski y Max Walscheid.

El grupo de 15 corredores en ataque tenía también a bordo corredores veloces como Sebastián Molano (UAE), Simone Consonni (COF) y Nikias Ardnt (DSM), además de equipos con más de un corredor como el Movistar, Alpecin-Fenix y el Lotto Soudal.

Victor Campenaerts (TQA) camino a su primera victoria en una grande. Foto ©LaPresse

Con un buen manejo de sus recursos, el TQA mantuvo siempre en alerta a Campenaerts para que pudiera salir a cualquier ataque en el último giro del circuito en territorio esloveno-italiano. Y fue de esa manera que a la salida Oscar Riesebeek (AFC), el belga se pegó a la rueda del corredor del Alpecin Fenix, en una salida donde también se montó Albert Torres (MOV).

En el tercer paso por el premio de montaña de 4ª categoría, a solo 18 kilómetros del final, los tres corredores habían sacado una renta suficiente para aspirar a la victoria, aunque Torres fue el primero en ceder ante la dureza con la que subieron dicha cota.

La lluvia hizo más intenso y dramático el duelo entre Campenaerts y Riesebeek, sobre todo con el terreno hacia abajo, con curvas peligrosas y pavé incluido en el último kilómetro. Aunque el belga no es sprinter, pudo leer mejor las intenciones de Oscar y por fin pudo levantar los brazos por primera vez en una carrera de tres semanas.

“La final fue una locura, pero para mí la salida de la carrera fue más importante”, declaró a los medios al final de la jornada Campenaerts. “Ya teníamos un súper ambiente en el equipo con dos victorias de etapa, pero seguimos dedicados a hacer algo hermoso del resto de la carrera. Dividimos el grupo desde el principio. Nuestro equipo tuvo la mayor cantidad de corredores en la escapada y ellos tenían fe en mí, así que estaba feliz de terminarla. Tres victorias es un gran logro. Sin embargo, no es solo mi victoria de hoy, es realmente un esfuerzo de equipo y espero que ayude a atraer patrocinadores porque lo necesitamos para sobrevivir como un equipo que también participa por una gran causa. Contribuimos a mejorar la vida de las personas gracias a las bicicletas ".

La etapa había empezado igualmente marcada por una dura montonera en los primeros kilómetros que neutralizó la carrera por media hora y que dejó 4 bajas. La de mayor impacto fue Emanuel Buchmann (BOH) quien era uno de los candidatos para subir en la clasificación general, pues se veía que mejoraba su forma en la montaña. Con síntomas de conmoción el equipo decidió retirar al alemán luego de protegerlo durante 14 etapas para que pudiera luchar con los mejores escaladores. Ahora la escuadra enfocará toda su atención a proteger la camiseta ciclamino que tiene Peter Sagan. Otros retiros por la caída fueron Jos van Endem (TJV) con 5 costillas rotas y contusión en un pulmón; Natnael Berhane (COF) con dislocación de clavícula y Ruben Guerreiro (EFN) con contusiones en el costillar.

El lote mayor, con los favoritos a bordo, decidió no gastar una gota extra de energía en la jornada, que además presentó peligro al final con la lluvia. El pelotón llegó a 17 minutos después de la victoria de Campenaerts.

Luego de un largo traslado hasta la ciudad de Sacile, la caravana se fue a dormir temprano con la etapa reina en mente y una salida programada a las 11am de este lunes.

LA ETAPA REINA

La primera cifra que asusta para cerrar la segunda semana es la longitud de la jornada con 212 kilómetros entre Sacile y Cortina d’Ampezzo, en el macizo de los Dolomitos. La segunda son los 5,700 metros de elevación positiva en la jornada y la tercera los tres premios de montaña con más de 2000 metros sobre el nivel del mar.

La etapa 16 comienza de hecho con una subida de 1ª categoría que se corona en los primeros 25 kilómetros: la Crosetta de 11.6km con una media de 7.1% y máxima de 11%. La lucha por conformar la fuga será feroz y el Ineos Grenadiers no querrá gastar tan temprano sin que se le vaya un corredor peligroso. También está el interés por la maglia azul que defiende hasta ahora Geoffrey Bouchard (AGC).

Quizás esa primera fuga no tenga el éxito de sobrevivir el día, ya que el trío de cimas dolomitas puede ser el camino a la victoria de etapa. Muchos pensamos que Dan Martin o Vincenzo Nibali (aunque también salió afectado de una costilla en la caída de la etapa 15) puedan tomar por asalto el cierre del Passo Fedaia y buscar mantenerse a flote. Esta segunda cima del día es la más larga con 14 kilómetros al 7.6% y máxima de 18%. Los ultimos 6 kilómetros son lo que se hacen más complicados porque la media está entre el 10.5% y hasta el 11.8%, plataforma ideal para hacer daño y tratar de dejar tocados a algunos gregarios.

Luego de un descenso de 10 kilómetros hasta Canazei, se sube a la cima Coppi de la carrera a 2,239 msnm en el Passo Pordoi de 11.8 kilómetros a una media del 6.8% y máxima del 10%. La subida no es tan complicada, pero es la primera que rebasa los 2,200. Si el Education Nippo o el Astana quieren proponer la carrera, quizás sea aquí una buena oportunidad.

Tras otro corto descenso de 10 kilómetros, el pelotón tendrá que llegar hasta Ponte Codalonga para empezar el ultimo puerto, el Passo Giau, que tiene un par de túneles en el ascenso. La media es de 9.3% en 9.9 kilómetros, pero los primeros tres son al 9.8%. La media no baja del 9% sino hasta los ultimos 2,600 metros, que están al 8.9%.

Si hay corredores en avanzada, es momento de alcanzarlos para tomar ventaja en el cierre del puerto y bajar sin estar condicionados a otros líderes. Son 17.5 kilómetros rumbo a la meta en Cortina d’Ampezzo en la región del Trentino. La bajada termina a 1,500 metros de meta donde hay un pequeño repecho en la bandera roja, un descanso y luego un falso llano de 4.6% hasta meta sobre adoquines en los ultimos 300 metros.

Aunque Egan Bernal (IGD) estará pendiente de la rueda de Simon Yates (BEX), a quien tiene a 1:33” en la general, otros equipos pueden intentar tomar la ofensiva de la carrera. No sabemos si se pueda, pero es mejor que los favoritos tengan por lo menos a un gregario por seguridad en la bajada final, de otra manera se está expuesto a quedarse varado por un caída o avería mecánica. Será un duelo entre la fortaleza física y el temple sicológico por las condiciones que se enfrentarán.

El pronóstico del clima asegura que habrá precipitación todo el día, en Passo Fedaia será de nieve con una temperatura del 7°c, mientras que Pordoi y Giau es de lluvia con 4°c. Un ominoso día donde la general puede tener algunas sorpresas.